Naiz

Un encierro de seis horas de duración en 1886

Con la llegada del nuevo año, comienza la escalera sanferminera, que en IRUINDARRA NAIZ vamos a acompañar de noticias curiosas sobre las fiestas con las que ir preparando la apoteosis del 7 de julio. Para ir abriendo boca, el peldaño de enero nos habla de un encierro de seis horas de duración que tuvo lugar en 1886 y la llegada del vallado del encierrillo allá por 1965.

Un toro entrando en la plaza de Iruñea, donde un astado permaneció seis horas en un encierro de 1886. (Idoia ZABALETA/ARGAZKI PRESS)
Un toro entrando en la plaza de Iruñea, donde un astado permaneció seis horas en un encierro de 1886. (Idoia ZABALETA/ARGAZKI PRESS)

En estos tiempos en los que los astados consiguen marcas de récord cubriendo el recorrido del encierro en poco más de dos minutos, todavía llama más la atención la duración que tuvo un encierro de 1886, que se prolongó durante seis horas. El motivo de esa duración se debió a que un toro, de nombre Garralda, se negaba a entrar en toriles. En vista de la actitud del morlaco, las autoridades pidieron desalojar la plaza para facilitar la maniobra, pero el público se negaba porque quería ver el espectáculo de la suelta de vaquillas. Finalmente se convenció al respetable con un bando y en el coso solo se quedó el personal de servicio, que echó el lazo al toro y lo metió a rastras en toriles.

El vallado del encierrillo, novedad de las fiestas de 1965. En 1965 se produjo una novedad en los sanfermines con la instalación por primera vez de un vallado de características similares a las del encierro para la celebración del encierrillo. El citado vallado se colocó por primera vez el día 11 de junio, aunque en la actualidad esa tarea comienza el 1 de junio y es una de las señales que anuncian a los irundarras que ya falta poco para que comiencen las fiestas.