NAIZ

Iruñea vive un 6 de julio inusual sin sanfermines

En una situación normal, este lunes 6 de julio hubieran comenzado los sanfermines en Iruñea, con el tradicional chupinazo. Tras la suspensión de las fiestas debido a la pandemia de covid-19, se ha visto una situación inédita, sin lanzamiento de cohete desde el Ayuntamiento, con controles en Alde Zaharra y gente congregada en la plaza consistorial con la vestimenta típica y alzando los pañuelos a mediodía.

Agentes de la Policía Local en el centro de Iruñea. (Jagoba MANTEROLA/FOKU)
Agentes de la Policía Local en el centro de Iruñea. (Jagoba MANTEROLA/FOKU)

Iruñea presentaba en las primeras horas de este 6 de julio un aspecto inusual en comparación con cualquier otro 6 de julio. La pandemia del covid-19 ha motivado la suspensión de los sanfermines, que deberían arrancar este lunes a las 12.00 con el tradicional chupinazo y esa suspensión ha hecho que, a primeras horas de la jornada, la ciudad tenga una imagen completamente distinta a la de cualquier 6 de julio.

Así, la mayoría de iruindarras ha renunciado a vestirse de blanco, al menos al inicio de la jornada, aunque a mediodía en la plaza consistorial se han congregado cientos de personas ataviadas con la vestimenta tradicional. Tampoco había mesas en la calle para los almuerzos, una posibilidad que ha prohibido el Ayuntamiento. Del mismo modo, no se veían multitudes de vecinos ni visitantes camino del centro para asistir al inicio de las fiestas y los bares presentaban un aspecto de tranquilidad. Así, la ciudad presentaba un aspecto más propio de cualquier día laborable de las últimas semanas.

En la plaza Consistorial ha habido presencia de la Policía Municipal para evitar aglomeraciones.

A las doce en punto del 6 de julio, en la Plaza del Ayuntamiento se ha vivido una situación inédita. No ha habido lanzamiento de chupinazo, no se han congregado miles de personas ni las autoridades han salido al balcón para anunciar el inicio de las fiestas. Pero, a pesar de la limitación de aforos y los estrictos controles de seguridad, un grupo de personas ha querido celebrar, vestidas de blanco y rojo, el inicio de estos «no Sanfermines» en la plaza consistorial.

Cuando han sonado las campanas de las doce, un espontáneo se veía arriba y arengaba a las alrededor de 400 personas congregadas en la plaza con el tradicional grito de «¡Viva San Fermín! ¡Gora San Fermin!», mientras sonaban cohetes y desde un balcón del Ayuntamiento se desplegaba un gran pañuelo rojo con el lemas «Los viviremos - Biziko ditugu».

Tanto el Ayuntamiento de Iruñea, como el Gobierno foral y el Parlamento de Nafarroa han realizado llamamientos reiterados en las últimas semanas para pedir a la ciudadanía que actúe con «prudencia» y «responsabilidad» y evite que se produzcan aglomeraciones en las calles y en los establecimientos de Iruñea durante las fechas en que tendrían que celebrarse las fiestas, entre el 6 y el 14 de julio.

El Ayuntamiento no ha organizado ningún acto festivo y ha remitido a la ciudadanía a esperar a los sanfermines de 2021 para poder disfrutar de las fiestas. La peñas tampoco han organizado actos y permanecerán cerradas al público.

Llamamiento del alcalde

Antes del mediodía, el alcalde de Iruñea Enrique Maya ha comparecido esta mañana en rueda de prensa para mandar un mensaje de prudencia a la población y explicar el dispositivo policial desplegado en algunas zonas de la ciudad, como Alde Zaharra y el Ensanche.

Sobre los controles policiales, Maya ha recalcado que se trata de un «dispositivo medido» y que para «cumplir con los aforos se necesita un control». Del mismo modo, ha agradecido a los hosteleros la postura de «máxima responsabilidad» a la hora de respetar las medidas de seguridad en establecimientos y terrazas.

Por su parte, el Jefe de la Policía Municipal de Iruñea, Javier Goya, ha precisado que los controles solo van a estar presentes en caso de que se detecten aglomeraciones, con especial atención a los días de hoy, mañana y el fin de semana.

Controles para evitar aglomeraciones

Se han instalado controles de aforo en seis zonas de Alde Zaharra que cuentan con un mayor número de establecimientos de hostelería, así como en la plaza Consistorial y en la plaza del Castillo.

Se han habilitado 14 puntos de controles en las entradas y salidas de las calles Jarauta (entre San Saturnino y el inicio de la calle Descalzos), San Nicolás, Pozoblanco-Comedias, Estafeta-Espoz y Mina, Calderería y la zona de la plaza de la Navarrería. En cada una de ellas se ha calculado un aforo permitido en la calle, teniendo en cuenta la superficie de la vía y las medidas de distanciamiento social existentes.

Desde Policía Municipal se controlará que se cumplan los niveles de aforo de cada establecimiento hostelero. Se hace un llamamiento a los propios establecimientos para que, en el caso de que no puedan controlar el cumplimiento de esas normas (aforo, distanciamiento, uso de mascarillas, etc.) procedan a apagar la música, encender la luz, dejar de servir y avisar a Policía Municipal, que «acudirá inmediatamente para reestablecer la situación».

Se recuerda, además, que no se podrá superar el 75% del aforo máximo permitido en el interior del local o los 2,25 metros cuadrados por persona usuaria, en su caso, de las zonas autorizadas para uso público. Las terrazas al aire libre podrán ser ocupadas al 100% del aforo de las mesas permitidas en la licencia municipal.

En Alde Zaharra y entorno no se autorizarán almuerzos y comidas en la vía pública. Por lo tanto, queda prohibido sacar mesas para almuerzos durante estos días. Quedan especialmente prohibidos los altavoces en fachadas, en exteriores o en ventanas y puertas orientados hacia el exterior. Atendiendo a la responsabilidad de cada establecimiento, se solicita y recomienda no emitir los días 6 y 7 de julio música sanferminera.

Limpieza y distanciamiento social

Los horarios de los establecimientos, así como la emisión de música, se corresponderán con lo permitido por la normativa reguladora habitual. Se deberá cumplir la medida de mantenimiento de la distancia de seguridad interpersonal que será de al menos 1,5 metros o, en su defecto, medidas alternativas de protección física con uso de mascarilla. Además, se limpiará y desinfectará el equipamiento, en particular mesas, sillas, barra, así como cualquier otra superficie de contacto, de forma frecuente.

Asimismo, se deberá proceder a la limpieza y desinfección del local por lo menos una vez al día. Los elementos auxiliares del servicio, como la vajilla, cristalería, juegos de cubiertos o mantelería, entre otros, se almacenarán en recintos cerrados y, si esto no fuera posible, lejos de zonas de paso de clientes y personas trabajadoras.