Tres de las cuatro formaciones que sustentan el gobierno navarro han participado esta tarde en la manfiestación que ha recorrido Iruñea exigiendo la apertura de un debate social participativo sobre el proyecto de tren de alta velocidad. Miles de personas han marchado por la capital navarra tras la pancarta «Sí al tren, no al TAV. Herriak erabaki» que han portado, entre otros, Adolfo Araiz (EH Bildu), Mikel Buil (Poemos) y Marisa de Simón (I-E).

En la manifestación también se han podido ver representantes de diferentes zonas de Nafarroa, con pancartas como «Por un tren social. Alcaldes y concejales de la Zona Media» o «Tren público social. Cuenca de Pamplona». Además, también había carteles en los que se leían los nombres de las localidades navarras.

La manifestación ha comenzado en la Plaza del Castillo y tras recorrer varias calles de Iruñea ha finalizado en el paseo de Sarasate. Allí se ha dado lectura al manifiesto en el que se denuncia que «el TAV es una excusa para el negocio de la construcción» y que «es un arma política para rascar unos votos». Denuncia la iniciativa que es un proyecto «que no se sostiene», que supone «un despilfarro continuado» y «una máquina de endeudamiento que solo genera recortes y más recortes». Además, en el manifiesto se denuncia que deja a los pueblos de la Zona Media o de Sakana sin los servicios de larga distancia. 

Los organismos que apoyan la iniciativa creen que «existen alternativas más baratas y menos devastadoras» que pasarían por desdoblar la línea actual. 

Denuncian, sin embargo, que el proyecto ya está en marcha «con imposición, consignas vacías y medias verdades» por lo que anuncian que harán «todo lo posible para desvelar sus intereses partidistas y de negocio». Añaden que «estamos a tiempo» para parar el proyecto y exigen la apertura de un debate social participativo.