NAIZ
IRUÑEA

Los acusados de la violación grupal de sanfermines se declaran «inocentes»

Los cinco acusados de haber violado en grupo a una joven madrileña de 18 años en los sanfermines de 2016 se han declarado «inocentes» en la primera sesión del juicio, en el que seguirán las acusaciones populares del Ayuntamiento de Iruñea y el Gobierno de Nafarroa  después de que los magistrados de la Audiencia de Nafarroa hayan rechazado el recurso presentado por las defensas.

Los medios de comunicación toman declaración al abogado Martínez Becerra sobre el juicio de la violación grupal de sanfermines ante la Audiencia de Nafarroa. (Aritz INTXUSTA)
Los medios de comunicación toman declaración al abogado Martínez Becerra sobre el juicio de la violación grupal de sanfermines ante la Audiencia de Nafarroa. (Aritz INTXUSTA)

Los cinco sevillanos están imputados por un delito continuado de agresión sexual, otro contra la intimidad y un tercero por robo con intimidación, por los que la Fiscalía pide 22 años y 10 meses de cárcel para cada uno.

Y es que, según el escrito de la acusación, los imputados, que se hacen llamar ‘la Manada’, bajaron la ropa interior de la joven y abusaron de ella de diferentes maneras «valiéndose de su superioridad física y numérica» y de la «imposibilidad» de la joven de «ejercer la más mínima resistencia».

Mientras, dos de ellos, «sin el conocimiento ni consentimiento» de la chica, hicieron grabaciones de vídeo y fotografías con sus móviles, «con la intención de vulnerar la intimidad de la víctima y posteriormente mostrarlos, enviarlos y difundirlos a su grupo de amigos».

La acusación añade que cuando «se dieron por satisfechos» y antes de abandonar el lugar, un portal de un céntrico edificio de Iruñea, se apoderaron del móvil de la víctima para que «no pudiera solicitar auxilio».

Sin embargo, al terminar la sesión de hoy, el letrado Martínez Becerra, que defiende a José Ángel P.M., Jesús E.D. y Ángel B.F, los tres en la prisión de Iruñea desde hace 16 meses, ha comentado a los periodistas que sus clientes, que siempre han sostenido que fueron relaciones consentidas, se han declarado «inocentes».

Lo mismo ha sucedido con los otros dos acusados, el militar Alfonso Jesús C.E. y el guardia civil Antonio Manuel G.E, presos en la cárcel miliar de Alcalá de Henares (Madrid), aunque este último sí ha admitido haber «sustraído» el móvil de la joven.

Está previsto que el juicio se prologue hasta el día 24 a puerta cerrada para preservar la intimidad de la chica, que pide para los procesados 24 años y 9 meses de cárcel, mientas que las acusaciones populares solicitan más de 25 años.

Precisamente estas acusaciones, ejercidas por el Gobierno de Nafarroa y el Ayuntamiento de Iruñea, han sido una de las cuestiones previas que hoy ha abordado el tribunal.

Las defensas de los acusados han pedido que ambos sean apartados del caso, ya que la acusación popular la ejercen asociaciones y otras entidades pero no las instituciones salvo que sea un caso de violencia machista y este no lo es, teniendo en cuenta la legislación estatal. Por ese motivo, diferentes colectivos han solicitado que se aplique la legislación navarra, en la que sí se tipifica estos hechos como violencia machista.

El tribunal finalmente no ha aceptado la petición, como tampoco la planteada por la Fiscalía para que los procesados sean los primeros en declarar, lo que tendría que suceder mañana y no el día 22 como se ha señalado.

Por tanto, rechazado el cambio de orden, el juicio continuará mañana con el testimonio de la joven, para la que el tribunal ha pedido protección y que no se encuentre con los acusados en ningún momento, por lo que llegará al Palacio de Justicia acompañada por la Policía y declarará mientras los imputados siguen su testimonio desde otra sala por videoconferencia.

Para próximos días están citadas medio centenar de personas entre policías, testigos, y peritos psicólogos y forenses, aunque posiblemente decaiga algo la expectación que este juicio ha levantado, como lo probaba esta mañana la presencia de agentes y vehículos de la Policía Foral en número superior al normal y los 30 medios de comunicación acreditados.

Una expectación que sin embargo no ha supuesto ningún tipo de facilidad informativa ya que a las sesiones a puerta cerrada se suma el hecho, de que, salvo las breves declaraciones que ha realizado hoy Martínez Becerra, ninguna de las partes tiene reviso comparecer ante la prensa en sucesivas jornadas.