El solar en el que se va a actuar (parcela catastral 960 del polígono 7 de Iruñea) tiene una superficie de 278 m². De esta forma se mejorarán las condiciones del espacio peatonal ya que la acera alcanzará los ocho metros y se podrá completar el carril bici al mismo tiempo que se deja un amplio espacio para el paso exclusivo de peatones. Además, se sustituirá el degradado edificio existente, que no ha sido rehabilitado y actualmente está deshabitado, por otro. El nuevo bloque tendrá ocho viviendas y mantendrá los locales comerciales en el bajo.

El bloque actual cuenta con 12 viviendas, de las que nueve ya han sido adquiridas en los últimos años por el Ayuntamiento de Iruñea por lo que está pendiente de obtener la propiedad de otras tres viviendas y de los locales de la planta baja. A los tres propietarios se les comunicó el valor de la tasación de las viviendas y locales y el interés municipal por adquirirlas. La imposibilidad de llegar a un acuerdo ha hecho que el sistema elegido para lograr la propiedad de todo el inmueble sea el de expropiación, según señala el Consistorio en una nota.

Portales rehabilitados con ayudas municipales
El plan actual planteaba dedicar todo el solar a ampliar la acera. La nueva propuesta apuesta por levantar un edifico de menor tamaño lo que permitirá recuperar parte de la inversión realizada al surgir un suelo con aprovechamiento lucrativo. Al disminuir el número de viviendas no existe obligación de destinar ninguna a algún régimen de protección pública.

El edificio que será demolido es de la década de 1950. Los contiguos, portales 4 y 6, han sido rehabilitados con subvenciones municipales y se encuentran en buen estado. El proyecto de urbanización, ya ejecutado casi en su totalidad, ha creado una nueva calzada para la avenida de Gipuzkoa, junto a la que queda la acera y el carril bici. El edifico del número 2 provoca un estrechamiento de la acera en la que sólo cabe, y no del todo, el carril-bici.

La sociedad pública municipal Pamplona Centro Histórico-Iruña Biziberritzen, por encargo del Pleno, redactó en 2012 unos estudios de las zonas vulnerables cuya primera recomendación era eliminar edificios de infravivienda o en estado de ruina y señalaba, en concreto, la demolición del portal número 2. El Consistorio asumiría el gasto de adecuar las condiciones estéticas de la fachada que quedara vista tras el derribo.

El nuevo edificio que se levantará tendrá una fachada y un local comercial hacia la avenida de Gipuzkoa en lugar de una medianera ciega como la prevista inicialmente. Mantendrá las alturas y alineaciones noroeste y sureste de los portales 4 y 6, es decir, planta baja más cuatro alturas. Se ha establecido un plazo de dos años para la gestión de la unidad.

Tras esta aprobación inicial, se someterá el expediente a exposición pública durante un mes una vez publicado en el Boletín Oficial de Nafarroa y posteriormente será el Pleno Municipal el que deba aprobarlo definitivamente.