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Iruñea pone fin al legado de Santamaría en la Policía Municipal

El Ayuntamiento ha reordenado la Policía Municipal y le ha puesto un nuevo jefe. Jesús Munárriz da el relevo a Alfonso Torres al frente del cuerpo, pese a que Torres continuará como su segundo. El nuevo jefe de la Policía, que lleva 30 años en el cuerpo, admite que el deterioro de la imagen de la Policía Municipal en Iruñea ha sido «palmario» en los últimos años.

Jesús Munárriz, primero por la izquierda, nuevo jefe de la Policía Municipal de Iruñea. (@AritzIntxusta)
Jesús Munárriz, primero por la izquierda, nuevo jefe de la Policía Municipal de Iruñea. (@AritzIntxusta)

EH Bildu ha dado la vuelta a la estructura de la Policía Municipal de la ciudad y ha puesto un nuevo jefe, Jesús Munárriz, un agente con experiencia y «de la casa». El actual máximo responsable, Alfonso Torres, se convertirá en su segundo y será ascendido a Comisario Principal. El propio Torres sustituyó hace poco más de un año al polémico militar Simón Santamaría, que presentó su dimisión al hilo del juicio contra el exconcejal Ignacio Polo, que no fue debidamente sancionado cuando triplicó la tasa de alcoholemia y tuvo un accidente con un vehículo municipal.

El alcalde de Iruñea, Joseba Asiron, ha destacado que el nuevo jefe es «conoce perfectamente el cuerpo». También ha subrayado que Munárriz fue ascendiendo dentro del propio cuerpo siendo siempre de los primeros en cada oposición. Del mismo modo, ha ensalzado la labor de Torres en este último año en una etapa que ha calificado como «de transición» y en la que se ha conseguido «rebajar la tensión» dentro de la Policía. Por su parte, el concejal de Seguridad Ciudadana, Aritz Romeo, ha destacado que la decisión comunicada oficialmente hoy supone un importante paso de cara a implantar un modelo de «proximidad estratégica» que tiene el Ayuntamiento para la Policía Municipal.

Deterioro «palmario»

Munárriz ha asegurado que se va a «dejar la piel» y que convertirse en el jefe supone «un auténtico reto para el final de mi carrera». El nuevo jefe ha manifestado que su deseo es «estar a la altura y acabar con el clima de crispación para que la ciudadanía nos perciba como gente cercana».

A este respecto, Munárriz ha considerado que el deterioro de la imagen del cuerpo ha sido «palmario». Achaca este problema a «un cúmulo de circunstancias», pero apunta directamente a la «forma de trabajar que se ha llevado y a las directrices de la antigua jefatura», en alusión a la etapa de Santamaría en la que se produjo una militarización del cuerpo, así como la conversión de la Policía Municipal en uno de los elementos claves de la estrategia represora de UPN en la ciudad. El nuevo jefe también ha hecho alusión a que dentro del cuerpo no había «igualdad de oportunidades» para ascender ni para optar a cursos.

En último término, todos los presentes han elogiado la labor de Torres y Munárriz se ha mostrado muy contento de que pase a ser su segundo.