El Juzgado de Iruñea titulado por Fermin Otamendi ha levantado parcialmente el secreto del sumario del llamado «caso Osasuna», además de comunicar algunas decisiones tomadas. Destaca que se ha abierto una pieza separada para extender la investigación a la presidencia de Patxi Izco (que se prolongó durante una década y dio paso a Miguel Archanco en 2012). En concreto, se ha detectado la salida de dinero, mediante retirada de billetes, de un total de 3,09 millones de euros de las cuentas del club entre 2003 y 2007.

Se desconoce el motivo. El juez muestra «fuertes sospechas» de que «al menos parte de dicho dinero pudo destinarse a actividades ilícitas, no tanto en relación con posibles amaños de partidos –que en aquellos años no estaban tipificados en el Código Penal– como a ‘gestión desleal del patrimonio’, lo que podría dar lugar a delitos de apropiación indebida, delitos societarios, delitos de falsedad contable, delitos de blanqueo o delitos contra la Hacienda Pública».

Hasta ahora Izco solo había declarado como imputado por una anotación contable sospechosa de 76.711 euros al final de su etapa como presidente.

Por lo que respecta a la era reciente de Archanco, se confirma la investigación sobre la desaparición de 2,4 millones de euros de las cuentas de Osasuna. Otamendi ve indicios de que se destinaron a intentar amañar los partidos con el Espanyol y el Betis, los dos últimos de la pasada Liga en que Osasuna bajó de Primera a Segunda, además de primar al Betis por ganar al Valladolid, rival directo, en el penúltimo partido.

Por contra, el juez comunica que archiva la pieza separada abierta para investigar si Hacienda había cometido algún delito en su trato con Osasuna, ya que varios exresponsables del club indicaron que se había hecho la vista gorda con el club (creando así una deuda con las arcas forales que llegó a 53 millones de euros). Aunque esto es una evidencia objetiva, el Juzgado archiva esta parte porque no ve imputación delictiva posible. Alude a que Hacienda hizo una inspección de salidas de dinero en billetes de 500 euros en 2008, por parte del entonces gerente Angel Vizcay, y que fue cerrado «con una motivación un tanto escasa, pero ello por sí solo no es suficiente para considerar que estemen en presencia de indicios de algún tipo de delito».

Junto a todo ello, se confirma que el juez investigará a Archanco por un posible delito de insolvencia punible al haberse desprendido de diferentes bienes inmuebles de los que era propietario, en favor de su esposa y dos hijos, «escasas semanas después de abandonar la presidencia de Osasuna».